Búscame donde duermen los muertos

Yo dormí sobre tus manos
sobre tus pies
sobre las manos y los pies de desconocidos

También dormí en estaciones
en autobuses
en una roca

He dormido en un baño público
en un galapón
en un piquete

Igualmente dormí de guardia
por el instinto
en las faltas de estilo

Dormí en las cárceles
en los manicomios
en las cabinas telefónicas

"Dormir... tal vez soñar
¡Ay! allí hay algo que detiene al mejor
Cuando del mundo no percibamos ni un rumor
¡qué sueños vendrán en ese sueño de la muerte!"
Esas palabras de Hamlet temblaron
para que todos las oyeran

Me dormí en la esquina de un callejón
sobre la bolsa de la compra
en el espejo de Magritte que da la espalda

Me dormí en caserones deshechos 
y, una vez,
en una inmensa catedral
Aguanté con estoicismo la oscuridad
posándose sobre cada pilastra
como un cuervo,
que dice que no salga de allí,
que me quede quieta
que me quede muy quieta
en el lugar que acoge a sagrado a los tristes
como yo

Dormí y el tiempo transcurrió
días o meses
y fue una puta que no había demostrado nada
Soporté los golpes del tiempo que gemían
también como una puta,
como quieren

Recuerdo cuando dormía en castillos
en hoteles de lujo
en teatros

Ahora ya no puedo dormir

Desde este momento dormiré cubierta
bajo el extraño techo de la tierra que sepulta

Dormiré y si me buscas
allí permaneceré dormida


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